<h1>2-0 vs La Máquina ("En pleno otoño refloreció el Verde")</h1>

En un aceptable debut, el Verde se quedó con los primeros tres puntos del torneo. Sin pasar sobresaltos, pero pudiendo haber jugado mejor, los mejicanos esperan ahora por su segundo rival (Los Isótopos).

Para sorpresa de todos los presentes el último sábado a las 10:30 en la cancha 7, la planilla del partido indicaba la inhabilitación del Arquerazo Seligmann y del Gaita Zavala (3 y 2 fechas, respectivamente). A pesar de los intentos por eliminar dichas sanciones, ámbos jugadores debieron ver el partido desde áfuera.
Por ende...
13 presentes - 2 suspendidos = 0 suplentes.
Ciocca; M.Espósito, G.Azcona, Pereira, Dreyer; Sáez, G.Castro, Schkolnik, M.Castro; Demasi, F.Mayora.
(No olvidar la caótica presencia del Budín)


Yo no se si fueron los nervios y/o las tensiones del debut, pero desde iniciado el partido las impresiciones hicieron de éste un verdadero embole. Ninguno de los equipos lograba jugar la pelota al piso y ni hablar de conectar dos pases seguidos.
En esto último sí deben haber influido las ausencias de G.Zavala y el Carioca Bruzzi (distensión de ligamentos). Sin ellos dos en cancha (justamente dos de los mejor condicionados para bajar la pelota y conectar líneas) fue Willy Sáez quien paróse de mediocampista central defensivo... y bastante bien lo hizo, rememorando su participación en dicho puesto durante la temporada pasada.
Otra de las innovaciones en materia de posicionamiento táctico fue el despliegue de Gonzalito Castro como volante por la banda derecha; el Super-Roedor del equipo demostró estar capacitado para jugar en donde se lo necesite (no así, sus pulmones). Con el partido igualado en cero el Borrego casi se desvirga de las redes de Ciudad, pero su remate salió desviado por poco. Minutos después llegaría un centro de M.Castro que, ante la NO marca de los rojos, Demasi conectó de cabeza para abrir el marcador y bajar las revoluciones por minuto (RPM) de los Verdes. Conseguida esta calma, los mejicanos comenzaron a manejar un poco más la pelota y a monopolizar el juego, pero su rival se encontraba muy bien parado en defensa y no permitía penetrar en ella.
Finalmente, el único modo de llegar al segundo gol fue desde los doce pasos. Cuando un fuerte tiro del Pájaro Loco Schkolnik se disponía a duplicar la ventaja apareció la mano de un maquinista y el juez optó por rajarlo y pitar la pena máxima. En pocas palabras te cuento que Sáez cruzó su remate con derecha y que el arquero fue hacia el palo contrario, pero mejor miralo vos mismo. (El mayor de los hermanos Castro puso después un tiro libre en el travesaño, pero no hubo nada más en el primer tiempo).
Ahora sí... 2 a 0 y todos más tranquilos al entretiempo a pensar la segunda mitad del partido. Pero a la hora de salir a la cancha el hombre de más ni se sintió y, a pesar de que La Máquina no arrimó peligro al arco de Ciocca, los de Verde no encontraban el modo de liquidar por completo el encuentro; en una misma jugada, que podés ver haciendo click AQUÍ, la Locomotora Demasi demostró tener menos cintura que un pollo al momento de eludir al arquero rival (la única verdadera máquina de los rojos) y después Schkolnik estrelló un disparo en el travesaño dejando en claro que el tercer gol no iba a poder ser posible.
Descontando esta triple oportunidad desperdiciada, un cabezazo del Rasta y un tiro libre del Señor Espósito amagaron con dar rienda libre al tercer grito de la fría mañana, pero en ninguno de los dos casos pudo ser. El partido fue decayendo en los últimos minutos y las pocas contras en pies de La Máquina fueron demolidas por una sólida verdefensa.


Para destacar...
*La panzada que se hizo el plantel con un aaaaalto guiso [foto] en el pantano después del doparti.