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Luego de la VICTORIA ante Branca FC el León Pereira reaccionó alzándole la voz al juez ante el irónico y sobrante silencio como respuesta al pedido de la explicación del por qué de la roja al Gaita. Raúl Alvarez decidió informarlo y todo llevó a la siguiente carta:
Buenos Aires, 24 de septiembre de 2008
Al tribunal de disciplina:
Me dirijo hacia este organismo con el fin exponer la posición de Lucas Pereira jugador del Verde Cambalache ante el informe del árbitro Raúl Álvarez sobre el partido disputado el sábado 20 a las 9hs contra Branca FC.
Terminado el partido, Lucas, persona pasional de pocas pulgas y pocos pelos, reaccionó de manera exultante hacia al árbitro. Lo que lo motivó fue la mala actuación del juez en el transcurso del partido, sobre todo por la inentendible expulsión de Nicolás Graciano Zavala.
Luego que hayan pasado pocos segundos de este incidente, el señor Pereira le pidió disculpas públicas en la que quedó en el aire, dado el alto voltaje de la finalización del encuentro.
Luego de leer el informe del árbitro, di por entendido que esta disculpa no fue percibida por el árbitro. Sea esto así, en nombre de Lucas Pereira y el Verde Cambalache hago el presente descargo para esclarecer esta situación y a futuro comprometernos para evitar este entredicho entre jugador-arbitro
Atte. Santiago González Azcona
Verde Cambalache
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El fúlbo´ amater
Postulo que el (deporte) amateur es la representación sana y libre del (deporte) profesional. Que la profesionalización es, en general, el congelamiento de la creatividad, del abrirse camino; siendo el sendero cercado que nos permitirá acomodar esta actividad en la red de relaciones capitalistas, vender nuestra fuerza de trabajo como mercancía para ser contratado y participar en competencias deportivas detrás o bajo una institución o empresa. Aquí el flujo de relaciones del poder-hacer (LIBRE en el deporte), queda trastocado por la relación patrón-empleado del contrato establecido.
La exigencia por el resultado (propia de quien persigue la eficiencia de un emprendimiento en el cual ha invertido) en simetría con la sumisión de quien pende de un contrato y no quiere perder su trabajo concluyen en una relación deforme de poder y sometimiento, con gran trasfondo de intereses que muta -como decía- la disposición competitiva sana del deportista en competitiva violenta.
La exigencia por el resultado (propia de quien persigue la eficiencia de un emprendimiento en el cual ha invertido) en simetría con la sumisión de quien pende de un contrato y no quiere perder su trabajo concluyen en una relación deforme de poder y sometimiento, con gran trasfondo de intereses que muta -como decía- la disposición competitiva sana del deportista en competitiva violenta.
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